¿Cuáles son las obsesiones y compulsiones más frecuentes?

Las obsesiones más frecuentes son aquellas que tienen que ver con el miedo a estar contaminado, dudar si se hizo o no se hizo algo, preocupación por la simetría, preocupación por sensaciones del cuerpo o por contraer enfermedades, y las imágenes que incluyen violencia u otro contenido molesto (por ejemplo, pensar en hacerle daño a un ser querido; imágenes de contenido sexual, etc.)

Las compulsiones más frecuentes por lo general responden a las obsesiones. Es decir, si tengo miedo de estar sucio de las manos, la compulsión entonces puede ser el lavarme muchas veces o exageradamente las manos. Si la obsesión es pensar que no hice algo, como cerrar la puerta, la compulsión puede ser revisar muchas veces la cerradura. Incluso una persona puede sentir la necesidad de salirse del trabajo para ir a revisar que efectivamente cerró la puerta, o la llave del gas, por ejemplo.

Las obsesiones provocan ansiedad y la compulsión va encaminada a disminuir la ansiedad. Si la persona piensa que debe repetir algo tres veces para no tener mala suerte, el realizar esa acción lo hace sentirse tranquilo, al menos por un momento. El problema es que la obsesión regresa una y otra vez, por eso es una enfermedad. El que regresó del trabajo para ver si cerró bien su casa, al rato volverá a dudar si cerró. El que se lavó las manos, al rato volverá a pensar que no se las lavó bien o que se volvieron a ensuciar. El que repite una oración para quitarse una imagen desagradable, al rato volverá a pensar en esa imagen. Efectivamente, la obsesión se repite una y otra vez, causando ansiedad, y el malestar que le provoca esa ansiedad hará que realice la compulsión, también, una y otra vez.